domingo, 24 de junio de 2007

El mundo iluminado...

Y el mundo iluminado y yo, despierta.
Sor Juana Inés de la Cruz.
Al mundo lo ilumina la palabra. Enciende, provoca, arde. La palabra es la perpetua celebración de lo que somos, nos congrega a la luz de las abuelas que cuentan historias, de los amigos que necesitan escucharse, de las cartas que se guardan en el tiempo para leerse una y otra vez, porque en esa línea, en ese tímido verso alguien nos ha amado, de los poetas leidos en voz alta. Todo es una celebración de la palabra, a ella y a la luz, este blog que hoy empieza a iluminar. Esta primera entrada la dedico a Peggy y Rafael, impulsos cibernéticos que alientan, acompañan, y aunque lejos, están. Un abrazo amigos.