viernes, 16 de abril de 2010

En abril...

Sólo puedo decirlo con poesía, si quiero escribir prosa no puedo, lo tengo que decir con poesía. Así que mi corazón está ahora iluminado, también mi rostro, y quisiera encontrar las palabras adecuadas, pero parece imposible.

Se me ocurre por ejemplo sonrisa que inunda, corazón ensimismado, huellas, años, caminos. Se me ocurren cangrejos violinistas y también un poco de luna en este cuento, se me ocurren muchas cosas que no puedo decir. Se precipita la transparencia, se impacientan las ganas de amar y ser amada, se llenan todos mis resquicios para ser un barco hundido a fuerza de servir para algo. Tal vez sea yo como eso barcos, esos que hunden para que se conviertan en casa de algas, peces y corales. Tal vez yo soy después de mi naufragio, la ciudad más florecida, el mar que no he navegado.

Amo de punta a punta mis alas, mi libertad es un canto enamorado.