miércoles, 6 de enero de 2010

El nuevo año y yo.

Esta entrada está dedicada a Lore y Ruy, porque nada está perdido, porque seguimos siendo los de siempre, porque nada de nuestra integridad se ha fragmentado y porque somos AMIGOS. Los quiero mucho.

Si, a veces me doy miedo. La mayoría de las veces me traiciono, me traicionan mis sentimientos, mi imposibilidad de mentir. Me traiciona mi transparencia y mi ambigüedad, y las más de las veces me acarrea problemas: incomprensión, malos entendidos, etc.

En el recuento del pasado año, perdí muchas cosas pero gané algunas más, no quiero decir que aprendí, pero si dí grandes pasos. Hoy me enfrento a nuevas situaciones, aprendi del dolor, aprendí lo desgraciado que puede ser este mundo de los adultos y cómo a los treinta y tantos aún podemos ser tan inocentes. No se como algunos pueden traicionar la lealtad, no se como no pueden leer entre líneas, pero son expertos en el lenguaje subliminal, así aunque suene ilógico, pero en el caso lo es.

No tengo un plan de vida y tampoco me interesa, se y estoy segura que hay más después de esto. Este año me propongo seguir disfrutando de levantarme y abrir la puerta para ver el amanecer y dar gracias por el nuevo día, seguiré mejorando mi jardín y amando mis plantas, educaré a mi hija con todo el amor de siempre, disfrutaremos nuestra casa a mil por ciento, seré madrina de Mateo y seguiré con todo mi amor los pasos de Bufalito, estrecharé los lazos con mis amigos, saldré más al cine con mi comadre (ahora tendré dos, yeah!!!) leeré más, aunque ahora si de verdad los lentes me hacen falta, haremos más fiestas con C ( hay que festejar esa novela!!!), me alejaré más del mundillo cultural sudcaliforniano (qué placer, qué placer) intentaré por enésima vez la dieta y tal vez baje algunos kilos, seguiré cerca de mis padres y mis hermanos y conviviré más con mi hermana a la que amo mucho y a veces no se lo digo tanto, saldré con la Ale y una hielera en la cajuela y cantaremos mucho y fuerrrte jejeje, veré a mi precioso Josesito y a su hermano Javier y haremos piyamadas y salidas a la playa, quiero ir mucho a la playa este año, en fin, haré todas las cosas que me han hecho felíz y se que en el camino descubriré otras tantas. Me esforzaré por ser aquella que era: la que se sorprendía de todo y era optimista por sobre todas y todas las cosas del mundo, por más oscuras que fueran.

Pero sobre todo, amaré cada segundo de mi vida.

4 comentarios:

RUY dijo...

Gracias Fedra, la verdad es que nosotros semos muy felices con la comunidad que se está gestando, un apoyo y una fortalez, un fuerte, un escudo muy cómodo, todo es pura cura por fuera y en el fondo es pura honestidá. Les deseamos lo mejor a tí y a la lola en este año que comienza.

Clau dijo...

Muy bonita tu entrada Fedra, es cierto lo que dices, en estos tiempos tenemos que aprender más a disfrutar del día a día, y amar con fuerza a nuestros seres queridos y las cosas que tenemos, aunque no sean muchas, pero siempre que uno se detiene a inventariar la vida, se da cuenta de que hay muchas cosas que agradecer.
A mi también me da mucha felicidad saber el lazo que tenemos todos, aunque no nos veamos tan seguido, el cariño está ahí.

Un abrazo y feliz año.

Aurora Varela dijo...

FIDERRRRRRRR.

Te quedó muy bonita tu entrada, yo también estoy muy feliz de que ahora disfrutemos más nuestra casa y te prometo que cada vez será mejor. TE QUIERO MUCHO.

Lorenita dijo...

Me encanta cómo has escrito esto, es como un manantial de agua clara y melodiosa. Me has trasladado de nuevo al principio del camino, a mí misma y mis sueños. Tampoco yo sé que va a pasar pero estoy muy agradecida por todo lo bueno y no tan bueno que ha sido el año que se fue. No guardo rencor, no es necesario, porque todo mi cuerpo y mi corazón me susurran que Dios tiene extraños caminos para perdernos y conducirnos a nosotros mismos. Gracias por tu amistad, por tu calidez y tu locura, gracias lola por querer tanto a mis hijos. Sigan disfrutando su casita, es hermosa