jueves, 4 de marzo de 2010

Poemas de mi diario de medianoche

A veces me gusta oír la música que soliamos escuchar juntos
no se para que ni por qué
el corazón me pide acordes tan aprendidos

Me pongo a girar sobre mi pie izquierdo
una rueda de bailarina que no sabe bailar
un verso de Silvio y Aute en aquel cuarto de Los Cabos

Algo de nosotros se perfora en la noche de los muertos
algo de luz regala el último brillo de octubre
Me duermo con tu nombre besando mi boca.